viernes, 24 de agosto de 2012

LA ENTREVISTA Y LOS MOVIMIENTOS CORPORALES


 



¿Te gustaría buscar crear Conscientemente un sentimiento positivo en el reclutador por ejemplo, al saludarlo? pon en práctica lo siguiente:

Acercamiento y conexión: Al saludar, inclina tu cuerpo hacia adelante (esto comunicará que tienes una personalidad atenta y abierta a la socialización). Al estrechar la mano, el saludo debe ser firme, apretando lo suficiente y sin utilizar demasiado la fuerza (lo que transmitirá seguridad, confianza y cierta calidez).
Otra excelente práctica sería comenzar a sonreír al reclutador (de manera discreta) al verlo por primera vez, siempre mirando al frente de manera firme y a los ojos, para posteriormente anticipar el saludo.


¡Lo que debes evitar!
  • Poner límites de espacio: Retroceder el cuerpo (ir hacia atrás), dejando únicamente la mano enfrente o voltearte tratando de evitar la cercanía con el reclutador, son movimiento corporales que denotan un rechazo, desconfianza e inseguridad.
A considerar: El entrevistador no es como un amigo o conocido más, por lo que evita llegar con euforia a saludarlo e incluso a darle una palmada en la espalda.

La manera de sentarte: Al hacerlo, recuerda siempre sentarte bien (hasta el fondo de la silla) evitando hacerlo en el filo o en un extremo en particular (especialmente si la silla es grande), ya que lo que se transmite en este caso sería nerviosismo, también evita estirar las piernas hacia el frente recostandote en el respaldo ya que esto muestra una falta de respeto. La postura adecuada al sentarte debe ser erguida, sentándote en el centro y fondo de la silla, conservando brazos y piernas abiertos y colocados naturalmente en sus soportes.

¿Sabías que? sentarse correctamente de esa manera resulta ser un gran signo de confianza en uno mismo. Si te mantienes con la espalda encorvada puedes reflejar inseguridad y hasta aburrimiento.
El movimiento de las manos o su gesticulación también es un aspecto importante. Recordemos utilizarlas únicamente mientras hablamos (sin exagerar), haciendo movimientos sutiles, apoyados por los movimientos de nuestra cabeza. El movimiento aumenta la energía, confianza y variedad del canal de comunicación, pero no exageres al hacerlo, este sobre todo debe ser natural.